Un partido de fútbol se caracteriza por el desplazamiento constante del balón sobre la cancha, cuyo fin es impactar en la portería. Para esto, los jugadores utilizan sus pies o manos para poner en movimiento el esférico y realizan una serie de jugadas o saques con el fin de controlar el juego e impedir que el equipo contrario domine.  

Si has querido jugar fútbol o tan solo ver un partido, desconocer las jugadas o tiros de fútbol puede complicar el entendimiento completo de este deporte. Para que esto no evite que disfrutes de forma exitosa un partido, te decimos a continuación cuáles son los diferentes tipos de saque que permiten poner el balón en movimiento. 

Tiros en el fútbol básicos dentro de un partido 

Los tiros de fútbol son todos aquellos intentos por parte de los jugadores para patear la pelota hacia el objetivo del equipo contrario con la intención de marcar un gol. Estos pueden ser realizados desde diferentes posiciones y ángulos del campo de juego, y pueden variar en términos de potencia, precisión y técnica utilizada para ejecutarlos; estos son los siguientes:

Tiro libre

Es una infracción sancionada por el árbitro en la que un jugador comete una falta contra un adversario o incurre en otra infracción; se concede al equipo afectado y se lleva a cabo desde el lugar donde se produjo la falta. El equipo contrario debe mantener una distancia mínima de 9,15 metros (10 yardas) de la posición de la pelota hasta que se realiza el golpeo. A su vez, el jugador que ejecuta el tiro libre puede pasar la pelota a un compañero de equipo o intentar marcar directamente un gol, dependiendo de la situación.

Cabe destacar que de los distintos tiros de fútbol, este puede tener dos modalidades: directo e indirecto. En un tiro libre directo, el jugador que realiza el tiro libre puede marcar un gol directamente sin que otro jugador toque la pelota antes de que entre en la portería. En un tiro libre indirecto, la pelota debe ser tocada por otro jugador antes de que pueda entrar en la portería para que se conceda el gol. 

Tiro de esquina

Es uno de los tiros de fútbol que más riesgo generan, pues se desarrolla en una área muy cercana a la portería. El tiro de esquina, también conocido como córner, es una jugada que obtiene el equipo atacante después de que un defensor haya tocado el balón fuera de los límites del campo de juego, detrás de la línea de fondo.

Durante este tiro, el jugador del equipo atacante pone el balón en juego colocándolo en el cuadrante más cercano a la esquina del campo, mientras que los jugadores defensores tratan de despejar el balón del área de penalización para evitar que los atacantes anoten un gol.

Tiro penal

Sin duda, es uno de los tiros de fútbol que más influyen en el desarrollo de un partido, pues en muchos casos pueden definir el curso de un partido. Este se concede a un equipo cuando se produce una falta dentro del área penal por parte del equipo contrario. Por tanto, el equipo que ha sufrido la falta tiene derecho a ejecutar un tiro desde el punto penal y patear el balón hacia la portería del equipo contrario con la intención de marcar un gol.

El tiro penal se realiza desde una distancia de 11 metros de la portería y solamente el portero del equipo contrario tiene permitido permanecer dentro del área penal durante la ejecución del mismo. El jugador que realiza el tiro penal no puede tocar el balón de nuevo hasta que otro jugador lo haya tocado primero o haya tocado el poste o el travesaño.

Tiro de larga distancia

Es uno de los tiros de fútbol que requieren de mayor potencia; consiste en realizar un disparo al arco desde una distancia considerable, fuera del área de penalti o, incluso, desde el medio campo. Es un intento de anotar un gol directamente desde una posición más alejada del arco, en lugar de intentar una jugada de construcción más cercana al área del adversario.

Los tiros de larga distancia pueden ser muy efectivos en ciertas situaciones de juego, como cuando el equipo contrario defiende con muchos jugadores en el área, cuando no hay posibilidad de una jugada de pase o cuando se busca sorprender al portero rival.

Tiro de volea

Es un tipo de disparo donde el jugador golpea la pelota en el aire antes de que toque el suelo, utilizando una técnica de patada de una sola pierna. El jugador debe ser rápido y preciso para poder golpear la pelota correctamente en el aire. 

Este tiro de fútbol, a menudo, se utiliza para intentar anotar un gol desde una distancia más lejana de lo normal o para rematar un centro que se encuentra en el aire. Los tiros de volea pueden ser bastante espectaculares y emocionantes y requieren de una gran habilidad y técnica para ejecutarlos correctamente.

Tiro de cabeza

Finalmente, este es uno de los tiros de fútbol que se realiza con otra parte del cuerpo que no son las manos o pies. Consiste en un movimiento en el que un jugador golpea el balón con la cabeza para dirigirlo hacia una determinada dirección, generalmente hacia la portería contraria. Los jugadores pueden realizar un tiro de cabeza en cualquier momento durante el juego, ya sea en un saque de esquina, un tiro libre, un centro desde el campo o, incluso, durante el transcurso del juego normal.

Para realizar un tiro de cabeza eficaz, los jugadores deben saltar y dirigir el balón con la frente o la parte superior de la cabeza. Es importante que los jugadores mantengan los ojos abiertos y se centren en el balón para poder dirigirlo con precisión. El tiro de cabeza también requiere una buena coordinación y equilibrio, así como una buena técnica de salto.

Estos son los tiros de fútbol básicos para poner el balón en movimiento dentro de un campo, los cuales contribuyen al éxito de un equipo. Para realizarlos de forma efectiva es necesario contar con una buena técnica de juego y también con el equipamiento necesario: tachones de fútbol adecuados a cada tipo de terreno, así como shorts y jerseys que permitan libertad de movimientos. 

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