Actualmente, en el mundo fitness encontramos diversas actividades que le sacan provecho a las máquinas y accesorios para hacer ejercicio. Y es que precisamente la cualidad de estos mecanismos es brindarle opciones al usuario para ejercitarse desde cualquier espacio.
El spinning es una disciplina de entrenamiento que precisamente ha hecho eso y ha potencializado el uso de una bicicleta fija para convertirlo en un entrenamiento completo y bastante enérgico. Este consiste en realizar, junto a otras personas, al ritmo de la música y con toda la actitud, una serie de ejercicios sobre una bicicleta de spinning.
Quizá ya has visto en qué consiste el spinning o te imaginas cómo se realiza, y solo de pensarlo ya te diste cuenta que conlleva un gran esfuerzo, pero sobre todo deja grandes beneficios; por ejemplo:
- Beneficia la salud cardiovascular: al ser un ejercicio aeróbico, el spinning beneficia el funcionamiento del corazón y los pulmones, con lo cual se mantiene un mayor control de la presión arterial y mejora la circulación sanguínea y el ritmo cardíaco.
- Más resistencia: ante la práctica constante de los ejercicios en la bicicleta, el organismo se adapta y rinde cada vez de mejor forma; es decir, genera resistencia.
- Fortalecimiento óseo: resulta indudable que con esta disciplina los músculos entran en trabajo, lo cual hace que se contraigan con los huesos y de esta fuerza ejercida se fortalezcan.
- Mejor coordinación, equilibrio y control de movimientos.
- Disminución del estrés: mientras realizamos ejercicio segregamos diversas sustancias químicas que provocan efectos bastantes positivos en el cuerpo, tales como la dopamina, serotonina y endorfina que tiene efectos placenteros y analgésicos.
Estos son algunos de los beneficios que aporta el spinning, pero si estás pensando en practicarlo, debes saber que es una disciplina que requiere que dosifiques tu esfuerzo, mantengas un postura adecuada para evitar lesiones y, sobre todo, utilices una buena bicicleta para hacer spinning. Si aún no sabes muy bien cuáles son las características de esta, te las menciono a continuación.
Características de una bicicleta para spinning
A diferencia de las bicicletas estáticas, las bicicletas de spinning son más funcionales, ya que además de usarse para entrenamientos cardiovasculares permiten ajustar la intensidad y con ello trabajar la fuerza. Asimismo, permiten trabajar más zonas del cuerpo y establecer mayores tipos de entrenamiento. Estas se componen de las siguientes partes:
Volante de inercia
Este es el elemento más importante cuando de bicicletas de spinning hablamos, pues se refiere a la rueda que permite que giren los pedales y funciona a partir de la transmisión. A su vez, es esta la que determina la intensidad y el esfuerzo que tendremos a la hora de pedalear. Una de sus grandes cualidades es que acumula energía cinética, la cual da la sensación de estar utilizando una bicicleta en el exterior.
Ahora bien, en esta rueda es donde recae la resistencia de la bicicleta, ya que entre mayor sea su peso, más estabilidad y solidez tendrá todo el aparato. Por ejemplo, las ruedas de inercia que van de los 18 a los 20 kilogramos son recomendadas para aquellas personas que están incursionando en el spinning y no la usan con mucha frecuencia. Las que van de 20 a los 23 kilogramos para quienes buscan potenciar su entrenamiento y desean tener un pedaleo más eficiente.
Por su parte, las ruedas de inercia que tienen un peso mayor a los 23 kilogramos son ideales para los más profesionales, aquellos que entrenan de forma constante y que cada vez enfrentan mayores retos dentro de este aparato.
Transmisión
Es la encargada de enlazar al volante de inercia con los pedales y existen dos tipos de transmisión: por correa y por cadena. La primera es la más utilizada en la actualidad, pues su funcionamiento es más fluido y no genera ruido. A diferencia, la segunda funciona de la misma forma que las cadenas de una bicicleta exterior y provoca más ruido. Por eso, es recomendable siempre optar por una con transmisión por correa, ya que durará más y tendrá menores problemas en cuanto a su mantenimiento.
Resistencia
Es aquella encargada de controlar el movimiento de la rueda o del volante de inercia. Las bicicletas de spinning cuentan con dos tipos de resistencia: de fricción y magnética. La primera se caracteriza porque funciona a partir del roce producido entre los frenos y el volante de inercia, y para activar el frenado pueden usarse almohadillas o zapatas que al presionarse provocan una desaceleración.
Ahora bien, la magnética ofrece una mayor resistencia debido a que los imanes se encuentran más cerca del volante de inercia, lo cual provoca una reacción más rápida. Es por esta razón que es la opción más utilizada en estas máquinas, ya que es más precisa y además no produce ruido.
Sillín
Se refiere al asiento en el que nos colocamos al subirnos a la bicicleta; este generalmente es ajustable, pues busca darle la opción al usuario de adaptarlo a su medida de piernas y brazos.
Manillar
Corresponde al manubrio de la bicicleta, el cual también es ideal que tenga la opción de ajustarse en cuanto a altura y longitud, ya que favorecerá una buena postura y evitará posibles lesiones o dolores musculares por una mala ejecución.
Pedales
Estos son una parte fundamental del funcionamiento de una bicicleta, pues son en donde colocamos nuestros pies e imprimimos toda nuestra energía para darle velocidad a la máquina. Estos pueden tener correas para brindar un mejor agarre a los pies. Sin embargo, las bicicletas para spinning más profesionales o de mayor calidad cuentan con calas que se impregnan a las zapatillas de ciclismo para brindar un mejor agarre y rendimiento.
Como puedes darte cuenta, son muchos aspectos los que debes tener en cuenta al elegir la bicicleta para spinning, pero no te preocupes: existen muchas opciones de estas máquinas y se adaptan a las necesidades de cada persona. En nuestra sección de Bicicletas Fijas encontrarás diversas opciones de bicicletas para spinning, así que no dudes en buscarlas.
