Este jugador es el que otorga nuevas fuerzas al equipo cuando los planes no salen como se espera. Incluso, no es de extrañar que juegue más minutos que algunos titulares. Tener un sexto hombre, otorga renombre a la plantilla, demostrando que no solo sus jugadores principales son fuertes, sino que sus suplentes también lo son.
Historia del sexto hombre.
Se dice que Red Auerbach, legendario entrenador de los Boston Celtics, creó este tipo de especialistas al utilizar al base, Frank Ramsey. Este basquetbolista se sentía más cómodo comenzando desde el banco, así que el coach decidió usarlo de esa manera para aprovecharlo en sus óptimas condiciones. Curiosamente, John Havlicek, otra leyenda de la franquicia verde, ocuparía ese rol al retirarse Ramsey.
Tipos de sexto hombre.
Jugadores fuertes e internos.
Kevin McHale era un player de los Celtics de los años 80’ que podía cumplir funciones de pívot y ala-pívot, por lo tanto, podía reforzar la zona interna del ataque y la defensa, como así también realizar los tiros de media distancia. Este sería el primer tipo de sexto hombre con deportistas fuertes e internos.
Ágiles y determinantes.
Manu Ginobili, escolta de los exitosos San Antonio Spurs, se destacaba por su juego explosivo, buena defensa y tiros de larga distancia. Debido a que no tenía tanta resistencia como otros de sus compañeros, generalmente, comenzaba desde la banca y revolucionaba el partido con penetraciones, pases y bandejas. También era muy bueno en la marca hombre a hombre y tomaba tiros sobre la chicharra cuando se lo necesitaba. Un verdadero todoterreno.
Tiradores.
Cuando el equipo va perdiendo por muchos puntos, el entrenador suele utilizar a un sexto hombre tirador para ejecutar jugadas de tiros de tres puntos. Aunque en la actualidad, no se vea tanto a este tipo de jugador debido a la gran cantidad de lanzadores titulares que se emplean. Aun así, no es de extrañar que alguna plantilla siga usando a este tipo de especialistas.
Los tiradores no brillan por su juego sino por su efectividad, aunque también suelen ser buenos defensores.
Doble base.
En algunos equipos, cuando el base y el escolta están siendo presionados fuertemente. El coach emplea a un segundo base (sexto hombre) que ayude a volver a tomar el control de la pelota e intercambié la conducción del balón con el base principal. Este tipo de player también son buenos penetradores y ponen en alerta a la defensa rival.
La estrella emergente.
Las jóvenes promesas, muchas veces, no juegan como principales las primeras temporadas, pero si son talentosos se convierten en la primera opción de cambio de los entrenadores. Este tipo de players son enérgicos, explosivos e imprudentes. El coctel ideal para cuando se desea cambiar el flujo de un encuentro.
Siempre es una buena alternativa tener algún tipo de sexto hombre que ayude a cambiar o mejorar la dinámica del quinteto. Si no eres titular en tu team, tal vez, puedas ocupar ese rol y convertirte en el arma secreta. A lo largo de la historia del basquetbol ha habido muchos jugadores que encontraron esa habilidad especial que los hacía indispensables para sus equipos. Quizá tú también estés cerca de encontrar la tuya.
¿Conocías esta función? ¿Tienen sexto hombre en tu plantilla?
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