El rugby es un deporte apasionante que combina fuerza, velocidad y estrategia; se caracteriza por ser un juego de contacto en el que participan dos equipos de quince jugadores, quienes tienen el objetivo es marcar más puntos que el adversario pateando o llevando el balón de rugby más allá de la línea de meta y tocando el balón con la mano en el suelo dentro del área de portería contraria.
Este deporte consiste en un juego de ritmo rápido, con muchas carreras, pases, placajes y patadas, lo que lo convierte en una emocionante experiencia para el espectador. Pero también requiere de un equipamiento específico que se adecue a las necesidades de los jugadores dentro del campo, tal como el balón de rugby que cuenta con características peculiares que lo hacen ideal para esta actividad.
¿Cómo es un balón de rugby?
Si eres aficionado al rugby o apenas estás conociendo más sobre este deporte, debes saber que hay ciertas características que hacen que un balón de rugby se diferencie de algún otro. En primer lugar, tiene forma ovalada, a diferencia de otros balones deportivos que suelen ser redondos; esta forma proporciona a los jugadores de rugby un mejor agarre al manejar el balón y también permite una mayor precisión en las jugadas de pase y patada.
Respecto a su composición, el forro interior está compuesto por goma o plástico y la capa exterior suele ser de cuero, lo que los hace duraderos y cómodos de manejar. Asimismo, tienen unos hoyuelos característicos en el exterior, donde se unen las capas interior y exterior, los cuales están diseñados para favorecer el agarre y control durante el juego.
El peso del balón de rugby puede variar según la edad y nivel de juego, pero normalmente oscila entre los 410 y 460 gramos, y su longitud es de aproximadamente 28 centímetros y un diámetro de alrededor de 58 centímetros. Esto determina la talla de este accesorio, que se adapta a diferentes edades y niveles de habilidad:
- Tamaño 5: Es la medida estándar utilizada en partidos profesionales y de adultos, ya que sus dimensiones van desde los 58 a los 62 cm de circunferencia y el peso es de entre 410 y 460 gramos.
- Talla 4: Es el tamaño utilizado para partidos de mujeres y juveniles entre 10 y 14 años; mide entre 54-56 cm de circunferencia y pesa entre 350-380 gramos.
- Tamaño 3: Se utiliza para partidos juveniles de entre 7 y 10 años. Su medida oscila entre 53-54 cm de circunferencia y pesa entre 310-340 gramos.
- Talla 2: Este balón de rugby es utilizado para partidos infantiles con jugadores de entre 4 y 7 años; mide entre 47-48 cm de circunferencia y pesa entre 260-280 gramos.
Estas características hacen que un balón de rugby se distinga de los de otros deportes, dando a los jugadores una ventaja cuando están en el campo.
¿Cómo tener un mejor control sobre un balón de rugby?
Un aspecto fundamental para tener un mejor control y agarre sobre un balón de rugby es la forma en que se sostiene este, por lo cual al momento de agarrarlo es importante considerar lo siguiente:
- Es necesario asegurarse de tener las manos limpias y secas, ya que esto evitará que se resbale de las manos. Al sostenerlo, es conveniente abrir los dedos y extenderlos, de forma que se tenga un agarre más amplio y estable.
- También, es conveniente agarrar el balón con las manos en forma de “W” para crear un agarre fuerte y seguro; esto implica colocar los dedos debajo del balón y juntarlos en el centro, con los pulgares apuntando hacia arriba.
- Otro aspecto de gran importancia es colocar el balón de rugby cerca del cuerpo para evitar que el oponente lo arrebate. Asimismo, es muy conveniente mantener los ojos en el balón, lo cual ayudará a concentrarse en la pelota y estar preparados para cualquier movimiento repentino.
- La presión del balón de rugby debe ser la correcta para asegurarse de que este tenga un rebote consistente y se pueda controlar adecuadamente. Para conocer la presión, se puede utilizar un manómetro antes de cada uso. De igual forma es conveniente limpiar el balón después de cada uso y almacenarlo en un lugar seco y protegido del sol y de temperaturas extremas.
Recuerda practicar mucho para mejorar tus habilidades de agarre y control. Y no olvides que el rugby es un deporte de contacto y puede ser peligroso si no se juega con cuidado y con las protecciones necesarias. Por tanto, asegúrate de usar equipo de protección adecuado, que incluya un casco, hombreras, protectores bucales y unos tachones adecuados para el césped.
Siguiendo estas consideraciones, podrás disfrutar de este deporte de manera segura y efectiva, mientras sacas el máximo partido a tu balón de rugby. Encuentra en nuestra sección de Futbol Americano aquellos artículos que te permitirán rendir de mejor forma y mejorar la forma en que controlas el balón.
