Correr es una actividad con grandes beneficios para el cuerpo, que realmente tiene la facilidad de realizarse en muchos espacios públicos, así como en diferentes momentos del día. Ya sea que se practique el running durante el día o la noche existen ventajas, pero también consideraciones que deben tomarse en cuenta.
Cada que empiezas a hacer ejercicio es habitual que destines un tiempo determinado para realizar la actividad física; esto dependerá en gran medida de tus horarios de trabajo o actividades personales. Aunque también influye mucho el clima, sobre todo cuando se realiza en el exterior, pues no solo no es cómodo hacerlo con temperaturas poco favorables, también puede tener efectos perjudiciales para la salud.
Ahora bien, existe la controversia respecto al momento del día en que es más óptimo salir a correr, pues algunas personas creen que hacerlo en la mañana trae mayores ventajas y otras son partidarias de hacerlo en un horario nocturno. Por esa razón, a continuación te cuento cuáles son los beneficios de correr en ambos momentos del día.
Beneficios de correr en la mañana
Salir a correr cuando apenas está amaneciendo es una de las mejores formas de iniciar el día, ya que mejora el estado de ánimo y te mantiene con una mejor actitud durante tu jornada. ¿A qué se debe esto? Durante las mañanas aumenta la producción de cortisol, una hormona producida en las glándulas suprarrenales que funciona como transmisor de información entre las neuronas y los tejidos.
La característica de esta sustancia –cortisol– es que además de su papel que juega en el metabolismo y el sistema inmunológico, se incrementa cuando el cuerpo se encuentra sometido a altos niveles de estrés. Debido a esto, hacer ejercicio, sobre todo en la mañana que es cuando los niveles son superiores, es fundamental para mantener en equilibrio esta hormona y reducir el estrés.
Además, cuando corremos nuestro cuerpo libera endorfinas, que son sustancias producidas por el organismo cuyo objetivo es darle al cuerpo la sensación de placer y bienestar, así como reducir el dolor. Asimismo, durante el running se incrementa la producción de serotonina, un neurotransmisor que genera una sensación de bienestar en nuestro estado de ánimo. Así como también de dopamina, la cual provoca una sensación de placer y relajación. Sin olvidar la oxitocina que es aquella sustancia relacionada con el enamoramiento, pues esta interviene en procesos sociales como la confianza y el apego hacia los demás.
Sin duda, producir todo esto al iniciar el día y la rutina diaria es de gran ayuda para enfrentar las demás actividades, pues qué mejor que hacerlo con la mejor actitud y sintiéndonos más activos y sin sueño.
Beneficios de correr en la noche
Quizá lo tuyo no es levantarte tan temprano o se te dificulta hacerlo por tus horarios. Si es así, no te preocupes: puedes obtener grandes beneficios de correr en las tardes o noches. Una de las más importantes es ayudarle al cuerpo a liberar todo ese estrés que se pudo generar a lo largo del día, ya que como mencioné anteriormente al realizar ejercicio liberamos hormonas que reducen el estrés, la ansiedad y los síntomas de la depresión.
Otro de los beneficios de correr en la tarde o noche es que para ese momento nuestro cuerpo ya recibió en distintas ocasiones alimento y entró en un proceso metabólico que convierte a los aminoácidos, ácidos grasos, azúcares, entre otros en energía para el buen funcionamiento del cuerpo. Así, estaremos listos para poder realizar un ejercicio de mayor intensidad, y que contamos con las calorías suficientes para rendir adecuadamente.
Asimismo, como consecuencia de la actividad que se desarrolló durante el día, nuestros músculos se encuentran más activos y preparados para iniciar a correr. Aunque esto no significa que debas saltarte los ejercicios de calentamiento, ya que sin estos los músculos aún podrían sufrir alguna lesión.
Consideraciones para correr en la mañana o en la tarde
Correr en la mañana o tarde tiene grandes beneficios para el cuerpo. Quizá alguien pensará que lo importante es ejercitarlo sin importar cuándo, y sí, realmente no hay nada mejor que intentar acabar con una vida sedentaria. Sin embargo, como pudiste darte cuenta las ventajas pueden ser un poco distintas, según la rutina de cada persona. Ahora bien, ya sea que decidas correr en la mañana o por la tarde es importante que tomes en cuenta las siguientes consideraciones para evitar una lesión o disminuir tu rendimiento.
- Alimentos: si decidiste hacer ejercicio durante las primeras horas del día, es probable que no hayas consumido algún alimento o bebida, pues te encuentras en ayunas. Sin embargo, realizar una rutina extenuante sin haber consumido algún alimento y bebido agua puede provocar aturdimiento, deshidratación o simplemente no rendir de la misma forma.
- Sueño: si, por el contrario, se te facilita más realizar ejercicio durante la tarde o noche, procura terminar al menos una hora antes de dormir, ya que si bien la actividad física puede ayudarte a dormir mejor, también puede complicar tu proceso de sueño. Esto se debe a que tu sistema nervioso, frecuencia cardiaca y temperatura durante el ejercicio se activaron y necesitarán entrar en reposo.
- Intensidad: cada que vas a iniciar a correr es fundamental ayudarle a tu cuerpo a entrar en calor con diversos ejercicios que lo ayuden a activarse. Sin embargo, durante la mañana nuestros músculos estuvieron en reposo, por lo que se vuelve más importante realizar un calentamiento muscular efectivo para evitar así lesiones en articulaciones o músculos.
- Temperatura: en ambos momentos del día es probable que las temperaturas bajen, sobre todo en estos meses del año. Por esa razón, recuerda siempre las mejores prendas y aditamentos para evitar molestias o dolores articulares. Puedes usar ropa deportiva con cualidades térmicas, rompevientos, guantes táctiles, pants o sudaderas que te ayuden a conservar el calor corporal.
Sal a correr durante el momento que mejor se acomode a tu rutina diaria, pero procura siempre hacerlo tomando en cuenta estas consideraciones. Visita nuestra sección de Running.
